¿Te has parado alguna vez a pensar cuántas veces sonríes al día? ¿Y la gente de tu alrededor, sonríe mucho o sonríe poco? ¿Qué sucede cuando ellos te miran y te sonríen? ¿Y cuándo les sonríes tú a ellos? ¿Cuáles son los beneficios de sonreír?
A lo largo de la lectura de este artículo vas a encontrar todas las respuestas a las preguntas que te acabo de realizar y, ¡espero que te sorprendan!
La sonrisa
La sonrisa es un gesto facial comunicativo que consiste en elevar los extremos de la boca de manera leve, como si te estuvieses riendo pero sin hacer ruido.
A través de la sonrisa muestras y transmites muchos sentimientos, emociones y actitudes, como por ejemplo: alegría, felicidad, placer, satisfacción, bienestar, confianza, gratitud, predisposición hacia los demás…
Según el filósofo y pedagogo español José Antonio Marina,
“la sonrisa es un signo expresivo de bienestar que fomenta la sociabilidad y favorece la comunicación entre las personas (…). Este gesto demuestra que se acoge amablemente a la otra persona y que existe una voluntad de comunicación”.
“la sonrisa es un signo expresivo de bienestar que fomenta la sociabilidad y favorece la comunicación entre las personas (…). Este gesto demuestra que se acoge amablemente a la otra persona y que existe una voluntad de comunicación”.
Dentro de lo que es la sonrisa podemos encontrar muchos tipos distintos, por ejemplo la sonrisa genuina, la sonrisa postiza, la sonrisa falsa, la sonrisa cruel, la sonrisa burlona, la temerosa, la triste, la distante…
¿Cuántas sonrisas eres capaz de identificar en ti mismo? ¿Y en los demás?
Según el psicólogo Paul Ekman, experto en el estudio de las emociones y expresiones faciales, existen 18 tipos diferentes de sonrisas que surgen de la combinación de 15 músculos faciales.
A lo largo de este artículo me voy a referir a la sonrisa genuina, también llamada la sonrisa de Duchenne, es decir, aquella que surge en tu rostro de manera espontánea, sincera y natural. De todas las sonrisas, esta es la más poderosa.
La diferencia entre una sonrisa genuina y una sonrisa que no lo es, es que en la primera se elevan las extremidades de la boca junto con las mejillas y se marcan las famosas patas de gallo, mientras que en la segunda solo se mueven los músculos de la boca.
Esta es la clave para diferenciar cuando alguien te está sonriendo de manera sincera y cuando no.
La sonrisa es una expresión básica en el ser humano común a todas las culturas y sociedades, es decir, la sonrisa es un gesto universal que utilizamos todos los seres humanos para expresar lo mismo: alegría, felicidad, satisfacción, disfrute, bienestar…
Paul Ekman contribuyó a este descubrimiento demostrando que existían tribus africanas que sonreían a pesar de no haber tenido nunca contacto con el mundo occidental, y lo hacían por motivos muy similares a los del resto de la población mundial.
A través de la avanzada tecnología 3D, se ha visto como los fetos en desarrollo sonríen en el vientre materno, y dicha actividad se mantiene cuando nacen, sobre todo mientras duermen, momento en el cual se producen más sonrisas en los recién nacidos.
También se sabe que los bebés que nacen ciegos sonríen cuando escuchan las voces de otras personas, por lo que se puede decir que la capacidad de sonreír es innata.
Datos curiosos sobre la sonrisa
Es tal la importancia de sonreír, que desde el año 1999 existe el Día Mundial de la Sonrisa, el cual se celebra el primer viernes de octubre, y desde hace varios años la ONU realiza rankings para medir el nivel de felicidad.
En el último ranking España se encuentra en el puesto número 36 de un total de 158 países. En el primer puesto se encuentra Suiza.
Si hablamos de cantidad de sonrisas emitidas por país, el orden cambia. Estados Unidos es el que más sonríe y Rusia el que menos.
Respecto al sexo, las mujeres sonríen más a menudo que los hombres.
Un 33% de los adultos sonríen más de veinte veces al día, mientras que el 14% lo hace menos de cinco veces. Este número es muy bajo en comparación con los niños, los cuales sonríen una media de 400 veces al día.
Como puedes observar el número de veces que una persona sonríe al día desciende de manera paralela a su crecimiento, es decir, cuánto más mayor eres menos sonríes.
A través de un estudio reciente se ha visto que las personas que se inyectan sustancias botulínicas alrededor de los ojos, ya no son capaces de sonreír de manera genuina, por lo que tienen mayor probabilidad de deprimirse.
Por el contrario, aquellas personas que se inyectan estas sustancias en la frente para eliminar las arrugas que se forman en esa zona, tienden a ser más felices porque han perdido la capacidad de fruncir el ceño.
Beneficios de sonreír
1. Sonreír te hace más feliz
Cuando sonríes, tu cerebro libera endorfinas, las cuales son sustancias naturales opioides que produce el Sistema Nervioso Central, que estimulan los centros cerebrales del placer y que circulan por tu cuerpo produciendo una serie de beneficios:
- Actúan como un analgésico natural disminuyendo los dolores corporales
- Reducen el nivel de estrés
- Fortalecen el Sistema Inmunitario
- Ayudan en la recuperación de muchas enfermedades, tanto enfermedades físicas como enfermedades mentales
- Aumentan la sensación de placer y bienestar
- Mejoran el estado de ánimo
- Y aumentan el nivel de felicidad
Las endorfinas se liberan cuando haces ejercicio, cuando tienes relaciones sexuales, cuando te dan un masaje, cuando te dan un abrazo, cuando tomas el sol, cuando comes chocolate, cuando escuchas música, cuando ríes y, por supuesto, cuando sonríes.
En muchas ocasiones la sonrisa es resultado de un estado previo de bienestar y felicidad, es decir, te sientes bien, estás feliz, sonríes y tu cerebro te recompensa por ello produciendo sustancias que te hacen estar todavía más feliz.
Pero otras veces estás decaído, desganado, triste… y alguien o algo te hacen sonreír. Tu cerebro te va a recompensar de la misma manera que en el caso anterior, es decir, los efectos positivos de sonreír son los mismos independientemente de si estás feliz o triste.
Lo mismo ocurre cuando finges una sonrisa, ya que el cerebro no es capaz de distinguir si dicha sonrisa es natural o forzada, por lo que libera endorfinas en ambos casos.
Como puedes observar el acto de sonreír produce que tu cerebro libere endorfinas que te hacen ser más feliz, independientemente de si sonríes cuando estás triste o cuando estás contento o de si sonríes de manera natural o de manera forzada.
Sonreír hace que seas más feliz.
2. Hace que te sientas mejor
Sonreír con frecuencia tiene muchos efectos beneficiosos que en conjunto hacen que te encuentres bien, que te sientas mejor en comparación con aquellas personas que no sonríen tan a menudo.
Algunos de esos efectos beneficiosos son:
- Reduce la presión arterial, disminuyendo las probabilidades de que sufras un ataque al corazón u otros problemas cardiovasculares
- Previene la depresión y la tristeza
- Genera estados de ánimo positivos y placenteros
- Favorece la homeostasis interna, es decir, el equilibrio interno de tu organismo
- Contribuye a tu salud, tanto física como mental
- Mejora la percepción que tienes de tu salud
- Te hace dormir mejor
- Relaja los músculos
- Reduce la tensión
- Ejercita el cuerpo
- Etcétera.
Se podría decir que la sonrisa es un medicamento natural que mejora la salud, y es que ya lo decía Charles Darwin: “Sonreír nos hace sentir mejor”.
3. Aumenta la esperanza de vida
En 2010 se realizó un estudio en la universidad Wayne State University de Michigan, Estados Unidos, cuyo objetivo era descubrir si la amplitud de la sonrisa de una persona tiene relación con la cantidad de años que vive.
El estudio consistía en analizar fotografías de jugadores de importantes ligas de baloncesto estadounidenses anteriores a los años cincuenta junto con sus datos vitales.
Los datos que obtuvieron fueron que los jugadores que sonreían en las fotos vivían una media de 80 años y aquellos que no lo hacían vivían una media inferior de 72,9 años.
Por lo tanto, los investigadores concluyeron que la amplitud de la sonrisa de una persona puede determinar la cantidad de años que va a vivir.
Aunque los resultados de este estudio hayan confirmado la hipótesis de los investigadores, esto no quiere decir que porque una persona sonría más ampliamente o más a menudo vaya a vivir más años sin lugar a dudas.
Pero el hecho de sonreír junto con todos los beneficios que se derivan de dicho acto y que has visto anteriormente (disminuye el nivel de estrés, mejora el sistema inmunitario, previene la depresión…) puede contribuir a vivir más, con mejor salud y más felices.
4. Mejora las relaciones sociales
Cuando sonríes pareces una persona más cercana, accesible, sociable, extravertida, amistosa, confiable, generosa, educada, positiva… lo cual te ayuda a empatizar, a relacionarte más fácilmente con los demás y a mejorar los lazos establecidos.
Y es que la sonrisa es contagiosa, por lo que si sonríes a alguien lo más seguro es que esa persona te devuelva la sonrisa, ya sea de manera consciente o inconsciente, lo cual te ayuda a acercarte a ella.
Como dijo Goleman: “La risa puede ser la distancia más corta entre dos cerebros, provocando un contagio irrefrenable que establece un vínculo social inmediato”.
Este contagio se produce por el efecto de las neuronas espejo, las cuales son las causantes de que al observar un gesto o una conducta la imites de manera inmediata.
Cuando sonríes a una persona y esta te responde con otra sonrisa, estás provocando cambios positivos en su estado emocional, como hemos visto anteriormente al hablar de las endorfinas y del poder que tiene una sonrisa para hacer que alguien se sienta mejor.
A lo largo de la historia se han realizado muchos estudios e investigaciones sobre la sonrisa y las relaciones sociales. Uno de ellos reveló que las personas confiamos más en un desconocido si este nos sonríe que si mantiene el rostro serio.
Otro estudio que se realizó en la Universidad de Harvard demostró que si una persona está contenta, existe un 25% más de probabilidades de que las personas que están a su alrededor se contagien de su estado de ánimo.
Una investigación que se realizó en Suecia reveló lo que ya te he contado en este apartado, que cuando ves a una persona sonriendo tiendes a sonreír tú también y te cuesta más fruncir el ceño o mostrar gestos de enfado.
Las sonrisas hacen que sea más fácil iniciar una conversación o una relación con alguien que no conoces, que parezcas más empático y cercano, que las relaciones sean más satisfactorias y agradables, que provoques sentimientos positivos en los demás…
Existe un dicho tibetano que resume muy bien lo que te acabo de contar, y dice así: “cuando le sonríes a la vida, la mitad de la sonrisa es para tu rostro y la otra mitad para el rostro de la otra persona”.
Sonreír te acerca a los demás.
5. Te ayuda a conseguir tus objetivos
Cuando sonríes las personas que se encuentran a tu alrededor te perciben como alguien seguro de ti mismo, competente, capaz de hacer frente a los problemas y con una buena autoestima, lo cual te puede ayudar a conseguir aquellos objetivos que te propongas.
Por ejemplo, si eres comercial y tienes que vender un producto, el hecho de sonreír hace que el cliente esté más predispuesto a escuchar aquello que quieres contarle.
La sonrisa también te puede ayudar si tienes una entrevista de trabajo, si tienes que acudir al banco a pedir un crédito, si tienes que pedirle un favor a alguien…
El acto de sonreír también ayuda a la hora de ligar, ya que las personas que sonríen transmiten una mayor autoconfianza y son percibidas como más atractivas en comparación con aquellas que no lo hacen.
Y es que la sonrisa atrae, lo cual multiplica las posibilidades de conseguir tus objetivos cuando se trata de convencer a alguien.
Sonreír te ayuda a conseguir tus objetivos.
6. Reduce el nivel de estrés
Como ya sabes, cuándo sonríes tu cerebro libera una serie de sustancias muy beneficiosas para tu organismo.
Algunas de esas sustancias, como las endorfinas, mejoran el estado de ánimo y contribuyen a que desciendan las hormonas relacionadas con el estrés, como el
cortisol, la adrenalina y la dopamina, produciendo un descenso del nivel de estrés en la persona.
cortisol, la adrenalina y la dopamina, produciendo un descenso del nivel de estrés en la persona.
Sonreír es un mecanismo anti-estrés muy efectivo.
Finalmente, solo me queda invitarte a que sonrías más a menudo, de esta manera, te sentirás mejor, serás más feliz y harás que los demás también lo sean.
Referencias
- Argyle, M. (2013). The Psychology of Happiness. (2nd edition). London: Routledge.
- Craig, G. J. Baucum, D. (2001). Desarrollo psicológico. México: Pearson Education.
- Davis, J. I. Senghas, A. Ochsner, K. N. (2009). How Does Facial Feedback Modulate Emotional Experience? Journal of Research in Personality, 43(5), 822–829.
- Krishna, A. (2011). An integrative review of sensory marketing: Engaging the senses to affect perception, judgment and behavior . Journal of Consumer Psychology.
- Strack, F. Martin, L. L. Stepper, S. (1988). Inhibiting and facilitating conditions of the human smile: A nonobtrusive test of the facial feedback hypothesis. Journal of Personality and Social Psychology, 54 (5), 768-777.
- TED. (2011, Mayo, 11). Ron Gutman: El poder oculto de una sonrisa. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=U9cGdRNMdQQ.
http://www.lifeder.com/beneficios-de-sonreir/
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